El yoga es una práctica antigua originaria de la India y que a lo largo del tiempo ha tenido diversas evoluciones. La mayoría de personas han oído hablar de los beneficios del yoga, pero no los conocen en profundidad.
El yoga es una forma muy efectiva de realizar ejercicio físico, pero además, los beneficios del yoga abarcan tanto la salud mental como la emocional y espiritual. Hoy dedicaremos este artículo a conocerlos más profundamente. ¡No te lo pierdas!
Beneficios físicos del yoga
Al referirnos a la parte física de nuestro cuerpo, los beneficios del yoga incluyen mayor flexibilidad, fuerza, equilibrio y resistencia.
Flexibilidad
En cuanto a la flexibilidad, el yoga es una forma excelente de estirar los músculos de todo el cuerpo. Algo que para muchas personas es necesario porque con el paso de los años, no podemos estirar nuestros músculos ni para atarnos los cordones de los zapatos… ¿o no? Gracias a la práctica continuada del yoga, realizando diferentes posturas, conseguimos que los músculos vayan estirándose con suavidad y con ello, ayudamos a aumentar esa amplitud de movimiento y reducimos la rigidez.
Fuerza muscular
Puede que aparentemente practicar yoga no te vaya a proporcionar fuerza muscular, pero piensa que muchas posturas que se realizan requieren que mantengas tu propio peso corporal. Con esto, se consigue fortalecer los músculos del cuerpo y mejorar la apariencia física. A ver, tengamos claro que si queremos tener un cuerpo de culturista, pues esta práctica no nos va a ayudar, pero si lo que quieres es sentirte con más fuerza, vitalidad y energía física, el yoga será un gran aliado.
Además, estos ejercicios te ayudarán a prevenir lesiones y mejorar tu calidad de vida a medida que pasan los años.
Equilibrio
El yoga también es excelente para desarrollar el equilibrio. Seguro que una de las primeras imágenes que se te viene a la mente al hablar de practicar yoga son esas posturas en las que te sostienes sobre una sola pierna o esas en las que crees que te vas a romper… Bueno, hay que ir poco a poco…
Pues sí, estás en lo cierto, la realidad es que el yoga cuenta con una gran variedad de posturas un tanto inestables. Bien, de eso se trata, de mejorar o aprender a mantener el equilibrio y la estabilidad.
Resistencia cardiovascular y respiratoria
Una característica de los beneficios del yoga y muy poco conocida es el de mejorar la resistencia cardiovascular y respiratoria. ¿Haciendo posturitas? Resulta que hay algunas formas de yoga, como el vinyasa y el ashtanga, que son muy dinámicas y pueden requerir un alto nivel de resistencia física.
Por otra parte, muchas posturas de yoga están diseñadas para mejorar la respiración, lo que puede ayudar a mejorar la función pulmonar y reducir el estrés.
Beneficios mentales y emocionales del yoga
Uno de los beneficios clave del yoga es el de mejorar la salud mental, que es de suma importancia para poder disfrutar de una vida saludable.
Calma y concentración
A medida que practicas las diferentes posturas de yoga, te concentras en la respiración, lo que te lleva a experimentar una sensación de calma y claridad mental muy beneficiosa para tu salud.
Es una sensación de paz y tranquilidad con tu yo interior que solo se puede entender al alcanzar esta concentración.
Por otra parte, un ejercicio que va de la mano del yoga, es el de concentrarse en las sensaciones que transmite el cuerpo en las distintas posturas, por lo que se mejora la concentración y atención.
Además, realizar estas prácticas ayudan a reducir esa actividad mental y esos pensamientos cíclicos de los que no conseguimos avanzar, lo que genera claridad mental y su posterior ayuda para tomar decisiones.
Estrés y ansiedad
El yoga se centra en la respiración profunda y consciente, algo que sirve de ayuda para reducir los niveles de cortisol, que es la principal hormona del estrés. Además de la respiración, muchas posturas de yoga están pensadas y elaboradas para ayudar a reducir la tensión en el cuerpo, por lo que también es una gran ayuda para reducir el estrés y la ansiedad.
Calidad del sueño
Padecer insomnio es algo que afecta a un gran número de la población mundial, siendo un trastorno que normalmente, deriva del estrés o de la tensión a la que las personas estamos sometidas diariamente.
Practicar yoga puede ser beneficioso para reducir ese estrés y dejar atrás la tensión acumulada, relajar el cuerpo y pensar con más claridad. Todo esto, conlleva que se reduzca la dificultad para conciliar el sueño y que éste sea más saludable.
Autoestima
Al empezar a practicar yoga, muchas personas no podemos realizar ni las posturas más sencillas, pero a medida que vamos practicando, controlando los movimientos, nuestro cuerpo y nuestra mente, llegamos a alcanzar los objetivos y unos desafíos que parecían imposibles. Esta superación nos llena de orgullo y hace que nuestra autoestima mejore, por lo que la confianza en nosotros mismos será mucho mayor.
Beneficios espirituales del yoga
La espiritualidad de los beneficios del yoga también es un punto importante y clave para que la práctica de esta disciplina te llene de sensaciones maravillosas.
Conecta contigo
Pasas la vida pendiente de infinidad de cosas, prestando atención a todo para que esto salga bien, para que aquello esté en orden, que no le falte esto a tal… pero dejas de lado lo más importante, tú. Sí, tú eres lo más importante, porque piénsalo, sin un tú, no existiría el mundo tal y cómo lo conoces…
A través de la práctica del yoga, puedes conocerte mejor, comprender tus pensamientos y emociones más profundas. Esto es importante para tener una mejor autoaceptación y comprender lo que realmente necesitas y buscas en esta vida.
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Conecta con el mundo
La conexión cuerpo-mente que puedes alcanzar practicando yoga, serás capaz de desarrollar una mayor conciencia del entorno y de tu lugar en él. Con ello, conseguirás apreciar y comprender el mundo y la naturaleza, llevándote a experimentar una sensación de bienestar espiritual de gran valor para ti.
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Para quién está indicado el yoga
Muchas veces, pensamos que todas estas características de nuestro físico las mantenemos cuando somos jóvenes aunque no practiquemos ningún tipo de deporte, que ya con la edad empezaremos a cuidarnos “¡qué error más grande!”, que te lo digo por experiencia propia, que tras muchos años sin hacer deporte o ejercicios de ninguna clase, voy a realizar un pequeño estiramiento y casi me quedo en esa postura para siempre.
En ese momento, me di cuenta la importancia que tiene el mantener el cuerpo en forma, y tras parar el tiempo por un momento, pude entender que para poder disfrutar de la vida, poder vivir la vida y sentir lo que es la vida, es necesario tener una buena salud mental, espiritual y física.
A partir de ahí, las cosas realmente innecesarias dejan de tener valor para aumentar el de las realmente importantes, y eso, depende de cada persona, desde amistades verdaderas, tu pareja, tu entorno en general hasta la conexión entre tú y la naturaleza.
Tras esta reflexión de mi propia experiencia, además de leer diferentes autores y visualizar todo tipo de videos sobre el tema, puedo decir que la práctica de yoga es una actividad que puede realizarse a cualquier edad, no hay un mínimo de habilidad requerido y no se identifica con ningún tipo de género.
Ahora bien, hay diferentes tipos de yoga y niveles de dificultad, tampoco queramos hacer posturas imposibles o llegar a la paz interior en un día… Dependiendo de tus propósitos y de lo que quieras conseguir practicando yoga, tendrás que practicar una disciplina determinada.
Dependerá de tu actitud que alcances tus metas, que avances a las siguientes y que descubras todo lo que escondes dentro de ti. Prueba diferentes disciplinas y quédate con la que más te llene, con la que más te haga avanzar, con la que más te haga sentir bien.
Para no hacer el artículo excesivamente largo, lo dejaremos aquí, no sin antes decirte que en nuestro próximo artículo hablaremos con mayor profundidad de las diferentes disciplinas que puedes encontrar en el yoga.
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