Los propósitos para el año nuevo suelen ser siempre los mismos. Desde Tu Portal Eco, te traemos unas propuestas algo diferentes.
Llega el momento de decir adiós a un año, de crear un espacio especial donde albergar todas aquellas cosas importantes que te han sucedido, de acomodar en un lugar privilegiado de tu memoria todos los logros que has conseguido y de dejar marchar las experiencias negativas que hayas podido vivir.
Son muchas las personas que al llegar esta época del año, deciden crear una lista de propósitos para el siguiente, siendo muchos de ellos tan comunes como dejar de fumar, ir al gimnasio, mantener una alimentación saludable.
Propósitos que la mayoría ni siquiera intenta, o abandona a los días o semanas de comenzar. Comento estos propósitos para año nuevo porque son los más populares, pero no hablaremos de ellos hoy (aunque no está de más tenerlos en cuenta, ya que mejorarían la salud).
Propósitos para el año nuevo
Me gustaría ofrecerte unos propósitos para el año nuevo que se salen un poco de lo común, propósitos que realmente son importantes, de los que no se suele hablar mucho y de los que pueden ayudarte en cada paso que realices en tu día a día.
1. Cree en ti
Este, es uno de los propósitos para el año nuevo más importantes.
Está muy bien que otras personas alaguen tu trabajo, las notas de tus estudios, lo bien que haces manualidades, cómo te manejas con las herramientas de bricolaje, lo genial que te desenvuelves con el ordenador, etc., pero ¿sabes qué? La persona más importante que tiene que creer en ti, eres tú.
Tómate un momento para ti, siéntate, túmbate y cierra los ojos. Busca todos esos momentos en los que has conseguido realizar algo, no importa lo que sea, busca esa tarea en la que sientes que todo fluye junto a ti, que lo que estás realizando se funde contigo y te llena de plenitud.
Ahora, es el momento de creer en ti, de tomar esas tareas como importantes logros en tu vida y sentir que eres una persona especial en ese ámbito.
¿Has oído hablar del síndrome del impostor? En pocas palabras, es cuando aún teniendo competencias para desarrollar alguna actividad, sientes que lo que has realizado no es suficiente, que cualquier otra persona lo hará mejor que tú.
Déjame decirte que todas las personas destacamos en algo, y sin importar qué sea ese algo, tú eres única.
2. Quiérete como eres
Somos 8.000 millones de personas las que habitamos en nuestro planeta tierra, y todas, somos diferentes.
Tenemos distintos color de pelo, estatura, peso, color de piel, pensamientos, creencias… pero muchas veces no nos contentamos como somos. Me gustaría tener más estatura, tener el cuerpo de esta famosa, el pelo de este actor, la voz de…
Está bien que quieras cuidarte, que quieras mantener un peso saludable, que cambies el color de tu pelo o que vistas de una determinada manera. Todas estas acciones son meramente estéticas que puedes hacer para gustarte más a ti, no a los demás.
Pero, ¿cómo eres realmente? ¿Eres una persona alegre, introvertida, apasionada…? Pues eres tú, con muchas virtudes y con algunos defectos, ya que ambas características son necesarias para mantener el equilibrio.
Realmente no importa cómo eres físicamente, pues es tu interior quien te otorga la capacidad de hacer que el resto de personas te conozcan y aprecien tal y como eres. Date una oportunidad y demuestra al mundo que seas como seas, eres especial.
3. Interactúa con otras personas
A lo largo de tu vida te habrás cruzado con cientos de personas y seguramente, solo hayas cruzado alguna palabra con un porcentaje muy pequeño.
Puede que recorras la misma trayectoria cada día para ir al trabajo, a estudiar, a pasear… Es muy probable que durante ese recorrido, al menos, te cruces con la misma persona cada día, ya sea esperando al autobús, en la parada del metro o al cruzar un semáforo. Sin embargo, lo máximo que has interactuado con ella ha sido la mirada.
Te puedo contar, que hace algunos años hacía el mismo recorrido todos los días, a la misma hora. Cada día, justo al final de mi trayectoria, me cruzaba con una chica que iba a trabajar. Uno de esos días, decidí saludarla con un simple “hola”, un saludo que se correspondió por su parte y que con el paso de los días, terminó en una pequeña conversación antes de empezar a trabajar.
Desde luego, esto no quiere decir que vayas a encontrar una gran amistad, ni que vayas a recibir el saludo de todas las personas, pero ¿qué puedes perder por saludar a alguien que ves cada día?
4. Sé amable
¿Por qué nos cuesta tanto ser amables? Aunque este punto está directamente relacionado con el anterior, tiene algunos matices.
Podemos culpar a la pandemia, podemos culpar a nuestro estado de humor, podemos culpar a la economía e incluso podemos unirlo todo y culpar al mundo de que nos esté convirtiendo en personas poco amables (pero esto ya sería otro tema a tratar y muy muy largo).
Agradable, cordial, afable, afectuoso o tratable, son algunos de los sinónimos que nos propone la RAE para el adjetivo “amable”.
Nuestra vida cotidiana nos envuelve en situaciones en las que ser amables, ayudar a otras personas, que sin embargo, en muchas ocasiones se quedan en acciones inexistentes.
Ayudar a alguien a cruzar la calle, a entender un cajero automático, a levantarse si se ha caído, a realizar una mudanza, a limpiar, a hacerle sentir mejor y así un sinfín de posibilidades.
Por el contrario, cada día puedo ver cómo se enfadan personas que conducen, cómo aceleran más para no dejar pasar o la falta de compañerismo en algunos ámbitos laborales, donde en lugar de ayudar, prima el egoísmo.
Este tipo de acciones o comportamientos, provocan que se apague la luz de nuestro interior, nos impide disfrutar, vivir, y lo más importante, nos impide ser felices.
5. Sé feliz
Ser feliz es una de las cosas más importantes de la vida, siendo un objetivo que cumplir todos los días. No lo dudes, y plantéatelo como uno de los propósitos para el año nuevo más importante.
Cada persona siente la felicidad de una manera diferente, ya sea en compañía, en solitario, creando, ayudando… No importa qué o quién te haga feliz, lo importante es que te sientas así cada día y que para ello, no tengas que perjudicar a nadie ni nada.
Reserva un momento para ti y piensa en lo que haces a diario, ¿qué te hace feliz? Si alguno de tus recuerdos ha hecho que el corazón se acelere, que sientas energía positiva recorriendo tu cuerpo y que una sonrisa se dibuje en tu rostro, has encontrado aquello que te hace feliz.
Si por el contrario no has tenido esa sensación, entonces, piensa en qué es lo que te gustaría hacer, qué es lo que realmente te hace sentir feliz y lucha por ello.
6. Sonríe cada día
Otro de los propósitos para el año nuevo que no puede faltar en tu lista, es la risa.
La risa es considerada una terapia, pero sonreír no se queda atrás.
Sonreír no es solo un gesto que realizas, ya que cuando sonríes aportas muchos beneficios para tu salud.
Entre muchas otras cosas, cuando sonríes, dejas atrás las emociones negativas, mejora tu respuesta inmune, mejora tu confianza y tus habilidades sociales, reduce el estrés y la ansiedad…
Además, la sonrisa es contagiosa, por lo que puedes ayudar a que otras personas, ya sea a empatizar, o a animarlas si están pasando un mal momento.
Sonreíste antes de nacer sin saber por qué, ahora, sonríe al levantarte porque la vida es maravillosa, sonríe a todas las personas que aprecias, sonríe al mirar al cielo, sonríe al contemplar la luna…
Sea por lo que sea, siempre tienes un motivo para sonreír.
7. Conecta con tu interior
Tenemos el privilegio de vivir en un lugar maravilloso, un lugar lleno de recursos naturales que nos ofrece la posibilidad de mostrarnos sensaciones inimaginables.
Una de esas sensaciones es conectar con tu yo interior, dejar de lado todo aquello material que te rodea y deja que la naturaleza te arrope.
Conecta con la naturaleza para conectar contigo y deja que todo su poder recorra tu ser, escucha todo lo que tu interior tiene que decirte, deja fluir tu voz y siente…
Llénate de energía y libérate de las cuerdas que atan tu felicidad.
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8. Cuida la naturaleza
La naturaleza es una parte vital de tu vida, sin ella, no existiríamos. La naturaleza nos prevé de lo necesario y esencial para poder vivir.
Es la que nos proporciona los elementos que hacen que nuestra vida pueda continuar, la que nos nutre, nos hidrata y la que nos habla sin palabras.
Cuidarla y respetarla, es lo único que nos pide, a cambio de pasar una vida entera en ella.
Plantéate realizar alguno de estos retos y cuando lo consigas, los demás (y muchos otros), los alcanzarás sin apenas darte cuenta.
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