Productos Naturales,Eco,Bio,Orgánicos, ¿son lo mismo?

Seguramente, hayas visto u oído los términos Producto Natural, Producto Ecológico, Producto Bio y Producto Orgánico, pero ¿realmente existe diferencia entre ellos? Y si es así, ¿qué es lo que diferencia a unos productos de otros?

A la hora de optar por una vida más saludable, querer contribuir con el cuidado del planeta y poner nuestro granito de arena para hacerlo más sostenible, nos encontramos con un aluvión de nombres para denominar este tipo de productos.

Diferencias entre productos Naturales, Ecológicos, Bio y Orgánicos

Antes de nada, aclarar que aunque estos productos los podemos encontrar tanto en alimentos como en cosmética o en aquellos que mejoran algunos trastornos de salud, no están regulados de la misma manera. De hecho, en productos cosméticos, no existe una regulación pública que establezca parámetros para diferenciar cosmética natural de cosmética ecológica.

Hoy, nos vamos a centrar en los productos de alimentación para que puedas poner en práctica una vida más saludable con ellos.

Como ya hemos comentado, seguro que te has encontrado con muchos productos etiquetados con estos nombres, aunque en bastantes ocasiones (más de las que nos gustaría a todos) los fabricantes de productos tienden a hacer algo de trampa en ello…

Lo primero es conocer el significado de estos términos y, según la RAE, son los siguientes:

• Natural: “Dicho de una cosa: Que está tal como se halla en la naturaleza, o que no tiene mezcla o elaboración.” Como ejemplos nos señalan madera o zumo natural.
• Ecológico: “Realizado u obtenido sin emplear compuestos químicos que dañen el medio ambiente.” Como ejemplos nos indican Agricultura ecológica o Tomates ecológicos.
• Además la definición de ecológico, se recoge en el DPEJ (Diccionario Panhispánico del Español Jurídico) como:  “Dicho de un producto: Que ha sido elaborado sin daño para el medioambiente, la salud humana, la salud y el bienestar de los animales o la salud de las plantas.” Además, tras esta definición aclaran expresamente: “Solo pueden etiquetarse como ecológicos los productos que cumplen estrictamente las normas de producción legalmente establecidas […] sobre producción ecológica y etiquetado de los productos ecológicos.”
• Bio: “’biológico, que implica respeto al medio ambiente’.” Un ejemplo de ello, bioagricultura.
• Orgánico: “Dicho de una sustancia: Que tiene como componente el carbono y que forma parte de los seres vivos.” Por lo tanto, en este caso, podríamos deducir que los alimentos orgánicos son aquellos que contienen carbono, los cuales están clasificados en tres grupos:
  • Glúcidos o azúcares.
  • Lípidos o grasas.
  • Proteínas.

Tras leer detenidamente las definiciones que nos brinda la RAE y pensando en productos alimenticios, podemos comprobar que las palabras Ecológico y Bio son sinónimas, pues ambas hacen referencia al respeto por el medio ambiente.

Entonces, ¿por qué podemos encontrar en los supermercados productos BIO y productos ecológicos? La respuesta es bien simple, se trata de puro marketing, ya que los consumidores percibimos estas palabras de manera diferente y eso, es algo de lo que se aprovecha el marketing (en cualquier tipo de producto).

Una vez sabido esto, veamos cómo se extrapolan estos términos al ámbito de la alimentación según los expertos:

Según la Academia Americana de Pediatría

• Alimentos naturales: Son aquellos alimentos que no contienen ningún tipo de ingrediente sintético, artificial o aditivos.
  
  
• Alimentos orgánicos: Estos alimentos se cultivan sin pesticidas artificiales, herbicidas o fertilizantes. Respecto a los huevos, la carne o los productos lácteos, éstos son obtenidos de animales que son alimentados con comida natural y en ningún caso se les ha administrado algún tipo de hormonas o antibióticos.

Según la Comisión Europea

• Alimentos naturales: No existe una definición clara respecto al término natural aplicado a los alimentos, aunque varios eurodiputados ya han solicitado ante la Comisión Europea que se establezca una.
• Alimentos ecológicos: En este caso, la Comisión Europea se extiende bastante más, estableciendo unas normas muy específicas para que un alimento pueda etiquetarse como ecológico y se aplican desde los productos para la producción hasta la cadena alimentaria.

Cómo ha de ser un producto ecológico

Profundicemos algo más en las características que han de cumplir los alimentos para que, según la Comisión Europea, éstos puedan denominarse como ecológicos, así como las normas de la UE para su producción.

Productos regulados para una producción ecológica

En este punto, nos encontramos con los productos procedentes de la agricultura, donde también se incluyen la acuicultura y la apicultura, que han de cumplir con las normas indicadas por la Unión Europea en el ámbito de agricultura ecológica. Estas normas son aplicables tanto a los productos en sí como a sus derivados. Algunos de estos productos son:

• Semillas y materiales de reproducción de plantas o cultivos, como esquejes, rizoma…
• Piensos.
• Productos agrícolas vivos o no transformados.
• Productos agrícolas transformados y que estén destinados a la alimentación de humanos.
• Levaduras utilizadas como alimento.
• Sal marina y cualquier otra sal que se destine a alimentos o piensos.
• Cera de abejas.
• Aceites esenciales.
• Tapones de corcho natural.

Normas para una producción ecológica

El objetivo de estas normas es el de proteger a nuestro querido y maltratado medio ambiente, poder mantener la maravillosa biodiversidad que existe en Europa (recordad que estamos hablando de seres vivos en los que excluimos a las personas) y conseguir que los consumidores crean en los productos ecológicos.

Principios fundamentales para una producción ecológica

• Está totalmente prohibido la utilización de OMG, es decir, Organismos Modificados Genéticamente o, en otra palabra, transgénicos.
• Se prohíbe el uso de radiaciones ionizantes.
• El uso de fertilizantes artificiales, herbicidas y plaguicidas está limitado.
• No es posible la utilización de hormonas.
• Los antibióticos están totalmente restringidos a excepción de los casos totalmente necesarios para la salud de los animales.

Qué han de hacer los productores ecológicos

Teniendo en cuenta los puntos anteriores, para realizar una producción ecológica los productores han de adoptar distintos métodos para mantener la fertilidad del suelo y que sus animales y plantas gocen de buena salud. Algunos ejemplos serían:

• Realizar rotación de cultivos: Al terminar el ciclo de un cultivo y cambiar esas plantas por otras de diferente familia y con distintas necesidades nutritivas, evitamos que el suelo se agote y que las enfermedades se perpetúen.
• Para restaurar la fertilidad del suelo se han de cultivar plantas de fijación de nitrógeno y cultivos de abonos verdes.
• Está prohibida la utilización de fertilizantes minerales nitrogenados.
• Utilizar tanto variedades como razas existentes y técnicas de control natural de plagas con el fin de reducir las malas hierbas y parásitos.
• Fortalecer las defensas inmunológicas naturales de los animales.
• Evitar el sobrepastoreo ya que de esta manera se protege la salud y el bienestar de los animales.

Normas para la ganadería

Si los ganaderos quieren vender sus productos como ecológicos, también deben cumplir con unas normas específicas.

Principios de la producción ecológica:

• La explotación sólo puede disponer de animales criados de manera ecológica. En caso de necesidad de reproducción, éstos deberán cumplir con unas normas específicas.
• Los animales han de ser alimentados con piensos 100% ecológicos.
• Los piensos han de obtenerse de la misma explotación donde están criados los animales o de la misma región.
• La clonación de animales o la transferencia de embriones está totalmente prohibida.
• Prohibidos totalmente aminoácidos sintéticos y aceleradores de crecimiento.
• El alimento de las crías ha de ser leche natural, siendo la materna la preferente.
• Aunque la reproducción tiene que realizarse de forma natural, está permitida la inseminación artificial.
• Tanto las materias primas, como productos empleados en la nutrición animal o coadyuvantes tecnológicos, sólo pueden utilizarse para piensos tras una autorización específica que indique que son aptos para la producción ecológica.

El Bienestar de los animales

• Las personas encargadas del cuidado de los animales ha de contar con conocimientos y técnicas necesarios tanto en materia de sanidad como en bienestar animal.
• Adecuación de establos y prácticas pecuarias óptimas, respetando el número de animales y las superficies mínimas que han de tener tanto en espacios interiores como en exteriores.
• El número de animales ha de limitarse, evitando el sobrepastoreo, ya que éste provoca erosión y contaminación del suelo.
• Siempre que haya posibilidad, los animales han de tener acceso a áreas libres o pastizales.
• No se pueden aislar o atar animales, exceptuando los casos que cuenten con razones de peso como bienestar, seguridad o recomendación veterinaria. En cualquier caso, el tiempo ha de ser limitado.
• Las hormonas o sustancias similares no están autorizadas, excepto cuando haya que realizar un tratamiento terapéutico indicado por el veterinario y este sea para un animal en concreto.
• Los animales enfermos podrán recibir medicamentos alopáticos de síntesis, en los que se incluyen antibióticos) si no es posible la utilización de productos homeopáticos o fitoterapéuticos y los profesionales de la medicina animal lo consideran apropiado.
• Sí se pueden utilizar medicamentos veterinarios inmonológicos.

Normas sobre la cadena alimentaria

Para que un producto pueda ser reconocido como ecológico, éste ha de cumplir unas estrictas normas desde su producción hasta que llega a nuestras manos, es decir, a los consumidores. Por lo tanto, además de los requerimientos anteriores, se han de cumplir las siguientes condiciones:

• La preparación de los alimentos ecológicos ha de estar separada en espacio o tiempo de los alimentos que no son ecológicos.
• El contenido ecológico del producto ha de ser como mínimo del 95%, teniendo en 5% restante unas condiciones muy estrictas.
• Etiquetar claramente y sobre las normas del etiquetado los productos que son realmente ecológicos.

¿Qué sustancias están autorizadas en la producción ecológica?

Para pertenecer al grupo de alimentos ecológicos, todos los alimentos transformados tiene que producirse principalmente partiendo de de ingredientes agrícolas (la sal y el agua no se tienen en cuenta), aunque pueden contener otro tipo de ingredientes siempre que hayan sido evaluados exhaustivamente y obtenida su consecuente aprobación por la Comisión Europea para la utilización en productos ecológicos.
Lo mismo ocurre con las sustancias que se utilizan en la agricultura ecológica para combatir enfermedades o plagas, ya sean fertilizantes, plaguicidas o aditivos alimentarios.

«Cualquier sustancia incluida en la lista para su uso en la agricultura ecológica debe cumplir las normas horizontales de la UE y, por lo tanto, haber sido evaluada exhaustivamente y aprobada por la Comisión Europea para su utilización en productos ecológicos.»

El vino, la acuicultura y la hidroponía

También existen unas normas para incluir estos productos como ecológicos.

El vino

En el caso del vino, éste ha de elaborarse con uvas y levadura ecológicas además de estar prohibido el uso de ácido sórbico y la desulfuración.

Acuicultura

Las principales normas para este sector son:

• Calidad del agua.
• Límite de población.
• Respetar la biodiversidad.
• Está prohibida la reproducción mediante hormonas artificiales.
• Manipulación respetuosa para evitar estrés y daños físicos.
• Se han de utilizar piensos ecológicos o procedentes de la pesca sostenible.
• Lugares específicos para moluscos bivalvos y algas marinas.

Acuaponía e hidroponía

Los cultivos hidropónicos sólo pueden obtener la categorización de ecológicos si han crecido de manera natural en el agua.

En el caso de los peces criados en sistemas acuapónicos, serán calificados como ecológicos si se ha respetado la legislación que se aplica a la acuicultura ecológica.

Como ves, los requisitos que ha de cumplir un producto para que sea ecológico son bastante amplios pero al alcance de cualquier profesional de estas ramas. Y como nosotros no podemos comprobar todos estos pasos, no nos queda otra que confiar en que los productos marcados como ecológicos, lo son realmente, o en el caso de verduras y frutas, cultivarlos nosotros mismos, que aunque no siempre es posible cultivar grandes cantidades, hay opciones como huertos urbanos que dan muy buen resultado. Si puedes tener uno en casa, te animo a que intentes cultivar.

¡Deja tu opinión y suscríbete a nuestra newsletter para no perderte ningún artículo!

Agradecimientos imagen header: Imagen de wayhomestudio en Freepik / Imagen de kues1 en Freepik / Imagen de Freepik / Imagen de macrovector en Freepik / Imagen de pch.vector en Freepik

Fuentes: Web oficial de la Unión Europea